Revolucionando industrias con sensores de fibra óptica
La fibra óptica ofrece tantas posibilidades, que parece capaz de abrirse camino en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida. Cada día se encuentran nuevas aplicaciones para este medio de transmisión y en gran medida, es gracias a los sensores de fibra óptica, que ha alcanzado tal nivel de penetración.
Hubo un tiempo en el que los sensores eléctricos eran los campeones indiscutibles del mercado, sin embargo, esto no significa que fueran perfectos. Los sensores eléctricos siempre han tenido sus puntos débiles, como las interferencias electromagnéticas, los ambientes industriales extremos y la presencia de sustancias inflamables; las primeras dos, circunstancias que afectan el funcionamiento y la precisión de estos dispositivos, mientras que, la última, representa más un riesgo de seguridad.
Debido a sus características dieléctricas, la fibra óptica no sólo no conduce electricidad (reduciendo los riesgos de incendios o explosiones), sino que también es inmune a la interferencia electromagnética. La fibra óptica también ofrece diversas ventajas ante condiciones adversas ya que, a diferencia de los cables metálicos, es muy resistente a la corrosión, por lo que cuenta con una vida útil más prolongada. Por otra parte, los diversos recubrimientos de la fibra, ayudan a protegerla de temperaturas extremas.
Por lo mencionado anteriormente, la demanda de sensores de fibra óptica está en aumento, sobre todo en el sector industrial. Algunas de las posibilidades que ofrece esta tecnología incluyen: monitoreo de vibración, presión, rotación, luminosidad, temperatura e incluso, el monitoreo de la concentración de ciertos químicos.
Las posibilidades que ofrecen los sensores de fibra óptica parecen ilimitadas, incluso fuera del sector industrial. Se prevé que los sensores de fibra óptica podrían jugar un papel fundamental en el desarrollo de wearables (tecnología corporal o vestible), así como para el internet de las cosas e incluso, en la industria médica, para el monitoreo del estado de salud de un paciente.
Otros sectores que ya están sacando provecho de esta tecnología incluyen: el sector urbano, la automatización de edificios, el petrolero, el carretero, entre otros.
En cierto sentido, lo único que limita las posibilidades de los sensores de fibra óptica, es nuestra imaginación.
